Para la exsenadora Piedad Córdoba el fallo del Consejo de Estado que tumbó este martes la sanción de la Procuraduría por 18 años “es la recuperación del buen nombre” de su familia y el suyo “por los daños por la estimagtización y la persecución”.

En diálogo con BLU Radio, la excongresista dijo que aquí “lo fundamental no es meter el dedo en el fondo contra el Procurador, creo que lo claro en este momento es que  gana la justicia, gana la cauteración del debido proceso y el derecho a la defensa y sobre todo ante la ciudadanía la credibilidad de la justicia y que esta sí opera”.

“Solo sé que hubo 17 votos a favor y seis en contra”, aseguró sobre la decisión del alto tribunal.

Sobre las pruebas que llevaron a la Procuraduría a tomar esa decisión, Córdoba indicó: ”el procurador dictaminó que yo era responsable de coadyuvar la actividad de la insurgencia de las Farc-EP, dio como  plena prueba unas copias word del computador de Reyes, pero además de eso se fundamentó en opiniones y agregó que yo era amiga del gobierno del presidente Chávez y era suficiente para sacarme de la vida política por 18 años”.

La exparlamentaria también se refirió a por qué la relacionaron con el nombre de 'Teodora Bolívar', sostuvo que esa fue “una apreciación de la procuraduría, no sé  si conocen la historia de Teodora en la época romana cuáles fueron  realmente sus funciones detrás del reino y cómo una prostituta se convierte en un momento determinado en una persona muy decisiva en esa época”

Manifestó que esa fue “una manera de insultar, de menospreciar y ‘pordebajear’ a una persona que como yo jamás he ejercido una profesión, que de todas formas es respetable son decisiones de las personas que la ejercen, pero en mi caso particular el hecho de propiciar, propugnar, de trabajar por la paz, cuando hablar de paz era un delito, donde todo se cuidaba para no meterse en problemas y caer ante la opinión pública, yo tomé la decisión de colocar todo mi capital político en la hoguera para lograr las liberaciones como un aporte que es fundamental a la decisión de la mesa de La Habana,  que es hoy lo que nos tienen ad portas de firmar un acuerdo especial de paz”.

En cuanto a cómo se dieron los diálogos con las FARC para la liberación de los secuestrados, Córdoba dijo que “hubo una serie de conversaciones epistolares de público conocimiento de todo el mundo y creo eso fue lo que propició la liberación de mucha gente que hoy no lo recuerda ni siquiera lo agradece a Colombianos y Colombianas por la paz, entre ellos políticos, soldados, policías, de lo cual no me arrepiento y lo volvería a hacer porque una de las acciones más detestables son las que tienen que ver con el secuestro”.

“Ahora es muy fácil hablar de la paz, ahora es muy fácil ser amigo de la salida política y negociada, ahora es muy fácil ir a La Habana y tomarse una foto, lo difícil era hacerlo hace 10 años. Yo sí hice contactos con las Farc, autorizada por el gobierno de ese entonces, autorizada posteriormente con otros gobiernos para lograr las liberaciones y para lograr lo que hoy el país está disfrutando y que muchos hoy se vanaglorian de que hicieron lo que no hicieron”, manifestó.

Sobre si en medio de los contactos con las FARC hizo algunas sugerencias para el manejo de secuestrados como Ingrid Betancourt, la exsenadora sostuvo que ella no tiene que hacerle “recomendaciones a una insurgencia que tiene un ejército que no me necesita a mí para absolutamente nada. Yo no soy ni comandante ni nada de las Farc, fui una ciudadana que no quería que este país y que yo saliera del Congreso , con 20 mil condecoraciones, como una viejita cacreca, que no hizo nada sino que realmente me dedique a buscarle al país una salida política y negociada al conflicto porque no creo en la guerra”.

Sobre la inhabilidad de 14 años que tiene por apoyar económicamente a un asesor para una campaña política, dijo que “la vida mía ha sido una carrera de obstáculos desde que dejé de ser consonante con el status quo y espero que se falle en derecho”.